¿Tienes problemas con rotura espontanea de vidrios de cristal templado?
En Videla & Asociados nos preocupamos de estudiar diferentes problemáticas que surgen en la industria de la construcción a fin de mejorar los procesos de ejecución de las empresas constructoras y de identificar los puntos de control y aspectos de calidad que minimicen fallas potenciales de elementos y/o sistemas constructivos.
En esta oportunidad revisamos la problemática de rotura espontánea de vidrios de cristal templado, los que cada vez más se han transformado en una solución de cierto estándar para un determinado mercado de viviendas, departamentos, oficinas u otro tipo de construcciones. Es así como nos ha tocado revisar casos de rotura espontanea en barandas de cristal templado instaladas: en balcones de edificios residenciales, áreas comunes como quinchos y zona de piscinas entre otros. El factor común, el rompimiento de dichos vidrios durante su periodo de servicio o vida útil, manifestándose como una rotura frágil (repentina), propia de este material debido a su estructura no cristalina, sin que se presenten indicios previos (deformaciones) que alerten de esta falla.
Al analizar los casos, las posibles causas de rotura de podrían deber a lo siguiente:
- Rotura por impacto. Si bien los vidrios de cristal templado ofrecen una buena resistencia a golpes, los bordes o cantos en una placa de cristal templado son zonas en que presentan una menor resistencia a golpes, lo que genera una rotura inmediata.
- Rotura por imperfecciones derivadas de daños en el traslado o almacenamiento. Las imperfecciones como rayaduras en la superficie de los cristales templados, o muescas producidas en los bordes, pueden provocar roturas inmediatas o posteriores provocados por las concentraciones de tensiones alrededor de estos defectos, provocados por los ciclos de dilatación y contracción.
- Rotura por concentración de tenciones derivadas de puntos de contacto con otros materiales. Al instalar vidrios de cristal templado, estos podrían quedar en contacto con otros materiales cuyo coeficiente de dilatación sea diferente al de este material. Al generarse cambios de volumen por variaciones de temperatura, estos materiales podrían entrar en contacto, generando puntos de concentración de tensiones ocasionando la rotura del cristal. De igual forma esto puede ocurrir en movimientos propios de la estructura por ejemplo los ocasionados por sismos.
- Rotura por estrés térmico. Se genera posiblemente cuando una zona del cristal se calienta más que otra adyacente. Si el diferencial de temperatura es importante, la zona de mayor calor de expandirá generando un área de tensión en el borde de la zona más fría.
- Rotura por inclusiones o defectos internos. En el proceso de fabricación del cristal es posible que se produzcan inclusiones de Sulfuro de Níquel, estas inclusiones son prácticamente imperceptibles, pero si se produce un incremento de volumen suficientemente grande, esto originará una resquebrajadura en el vidrioy la liberación de energía consiguiente será tan alta que causará el estallido del vidrio templado
En general las mayores fallas de cristales que hemos observado se producen por una deficiente instalación de cristales, generándose concentración de tensiones cuando el cristal entra en contacto con otro material y cuyo coeficiente de dilatación es diferente, típicamente con la enfierradura de los elementos de hormigón armado sobre los cuales se apoya una baranda de cristal.
En las obras que Videla & Asociados inspecciona esta causa se minimiza o se elimina debido a que hemos generados protocolos específicos que registran el procedimiento de instalación de cristales, verificando que se pone atención a los factores que podrían generar roturas controlando que esto no ocurran.
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